Con 30 mil voluntarios, La biotecnológica Moderna, cofinanciada por Estados Unidos, probará la vacuna experimental contra el coronavirus (COVID-19), que se encuentra ya en la tercera y última fase de ensayos clínicos.
El protocolo con la Agencia de Medicamentos de Estados Unidos (FDA) finalizó, y ahora el ensayo se realizará de la mano de los institutos Nacionales de Salud (NIH)
Estamos hablando de la fase decisiva de los ensayos, y mediante ella se podrá constatar, en una gran muestra de personas sanas, si la vacuna es más efectiva que un placebo para prevenir la infección.
la Universidad de Oxford, quien también ha estado haciendo un arduo trabajo investigativo para hallar la vacuna contra el virus, trabaja de la mano con la biotecnológica Moderna, y espera resultados para mediados de septiembre. Ambas van a la cabecera de la carrera mundial por la vacuna.
El Gobierno Estadounidense ha suministrado 483 millones de dólares a la compañía para el desarrollo de dicha vacuna tan esperada.
El 18 de mayo Moderna, informó sobre los primeros resultados esperanzadores en 8 voluntarios, se trataba de la primera fase.
Posteriormente se habló de la fase dos, con 600 voluntarios y que tuvo inicio a finales de mayo.
Si la dosis elegida para las pruebas (100 microgramos) demuestra ser efectiva, Moderna planea producir 500 millones de dosis por año y «posiblemente hasta mil millones»