Emiratos Árabes Unidos, se prepara para enviar a Marte una sonda llamada «Esperanza».
Solo Estados Unidos, India, la antigua Unión Soviética y la Agencia Espacial Europea han colocado con éxito sondas alrededor del planeta rojo. China también se dispone a enviar una, así como un robot.
El estado federado, conocido por sus rascacielos y sus islas artificiales con forma palmera, marcará un hito para un país árabe.
La sonda «Al Amal», «Esperanza» en español, será lanzada desde el centro espacial japonés de Tanegashima el 15 de julio y alcanzará la órbita en febrero.
El objetivo de la misión es proporcionar una imagen completa de la dinámica meteorológica de la atmósfera del planeta rojo y favorecer los avances científicos.
Dubái, miembro del proyecto, ha contratado a arquitectos para ejecutar una colonia espacial para los próximos 100 años bajo el nombre de «Ciudad de la Ciencia». El proyecto costará unos 500 millones de dirhams (más de 135 millones de dólares).
En septiembre de 2019, Hazza al Mansouri se convirtió en el primer ciudadano árabe en permanecer en la Estación Espacial Internacional (ISS), a la que se unió a bordo de un cohete ruso Soyuz.
«Nuestros abuelos siguieron las estrellas mientras caminaban hacia la gloria. Hoy, nuestros hijos las miran para construir su futuro», afirmó el gobernante de Dubái, el jeque Mohamed bin Rachid Al Maktum, en un tuit el martes.
«Emiratos Árabes Unidos ha entendido que el espacio es muy importante para su desarrollo y sostenibilidad. Es un puente hacia el futuro», declaró a la AFP Mohamed al Ahbabi, director general de la agencia espacial del país.
Sarah al Amiri, de 33 años, ministra de Tecnologías Avanzadas y subdirectora del proyecto, lo ve como «un mensaje de esperanza para la región, un ejemplo de lo que es posible si recurres a los talentos de la juventud y los usas de manera positiva».
«Invertimos en el espacio desde hace más de 15 años (…) y se trata de poner nuestro talento al servicio del resto de la región», declaró a la AFP desde Tokio.
«Pueden venir, adquirir experiencia, ser los vectores del cambio para toda la región, no podemos decir que esta región es inestable y permanecer pasivos», estimó la ministra.