Un día después de anunciar que dio positivo a la prueba de coronavirus (COVID-19), el presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, fue internado en el Hospital Militar de Tegucigalpa, aquejado por una neumonía.
Los médicos que evaluaron al presidente «indican que su manejo sea intrahospitalario» por «hallazgos laboratoriales de una neumonía», declaró a periodistas el portavoz del gobierno sobre la pandemia, Francis Contreras, desde el Hospital Militar.
Añadió que Hernández «presenta algunos infiltrados en los pulmones (pero) su estado general de salud es bueno».
El mandatario hondureño, de 51 años de edad, reveló el martes que desde el fin de semana comenzó a sentir malestares, los cuales resultaron ser causados por el COVID-19.
Hernández anunció que seguiría en sus funciones mediante el «teletrabajo», mientras empezaba el tratamiento de «síntomas leves».
Su esposa, Ana García, primera dama de Honduras, también dio positivo, aunque se informó que es asintomática.